Al presentar su informe, Niñez sin Fronteras este 13 de agosto, la Ciprodeni recopiló datos de enero a junio del 2019 del Instituto Guatemalteco de Migración, y las secretarías de Bienestar Social y de Obras Sociales de la Esposa del Presidente, según los cuales fueron devueltos al país nueve mil 739 menores de edad, un incremento del 32% respecto del mismo periodo del 2018.
De estos, el 79.2% eran menores no acompañados y el 90.5% fueron devueltos desde México, lo cual demuestra el reforzamiento de las medidas de seguridad en el vecino del norte, sobre todo desde mayo pasado cuando EE. UU. comenzó a presionar a ese país para que detuviera a más migrantes a cambio de no imponerle aranceles a sus productos.
También suben las detenciones en EE. UU.
Pero el endurecimiento de las políticas migratorias en México no ha sido suficiente para que miles de menores, ya sea solos o con sus familias, lleguen hasta suelo estadounidense, según la recopilación de datos de Ciprodeni.
De hecho, las estadísticas que reporta la Patrulla Fronteriza desde octubre del año pasado hasta julio del 2019 también van al alza y son más abrumadoras.
Por ejemplo, reporta que en esos 10 meses fueron detectados 28 mil 694 niños, niñas y adolescentes que ingresaron sin ningún acompañante a EE. UU., un incremento del 28%. Asimismo, el número de unidades familiares que se entregaron a la Patrulla Fronteriza en ese lapso fue de 177 mil 142, un aumento de 251%.
Cada unidad familiar se compone por un adulto, padre o madre, y por lo menos uno de los hijos, aunque hay algunas que viajan con dos o tres, e incluso familias completas, eso significa que a los 28 mil 694 niños detenidos en la frontera sur de EE. UU. por lo menos hay que sumarle otros 177 mil 142.
Causas
Pero, qué es lo que hace que los niños guatemaltecos estén viajando desproporcionadamente a EE. UU.
Según Otto Rivera, secretario ejecutivo de la Ciprodeni, existen problemas “torales” que causan la alarmante huida de los menores de edad hacia EE. UU. y que toda vez no se atiendan, la migración de la niñez continuará, aunque se endurezcan las políticas de migración.
De esa cuenta, la Coordinadora cita a las “múltiples manifestaciones de violencia”, la pobreza y la pobreza extrema, el poco acceso a salud, educación y recreación el que Guatemala sea incapaz de brindar “ofertas para retener a los niños en el país”.
“Si no se atacan y enfrentan las causas estructurales que motivan la migración de las niñas y niños seguirán yéndose. Se pueden endurecer las políticas y de hecho se han endurecido, pero eso no ha detenido la migración, más bien, ha sido un estímulo”, subrayó Rivera.
Culpable
Al hablar de quién es el responsable de la huida de los menores de edad, Rivera señala al Estado, y para respaldar su afirmación cita los principales indicadores que, asegura, muestran que “absolutamente” en los últimos años ha habido un retroceso en el tema de niñez y adolescencia.
Por ejemplo, en educación, hoy en día la cobertura de preprimaria apenas alcanza al 46%, y aunque sube a 78% en primaria, cae estrepitosamente en básicos al 42% y aún más cuando se trata de diversificado, cuya cobertura apenas es del 24%.
“Eso significa que solo cuatro de cada siete niños entrarán a básicos al dejar la primaria y apenas dos llegarán a diversificado”, apunta Rivera.
Otro de los indicadores que muestra un retroceso, afirma el secretario ejecutivo de la Coordinadora, es el relacionado a la desnutrición crónica, puesto que este mal ha aumentado hasta el 70%, y en algunas regiones la cifra se dispara hasta 90%, mientras la desnutrición aguda también ha subido en 36%.
Ante este panorama, Rivera cuestiona, “si los niños no tienen una buena oferta recreativa, educativa, deportiva y de salud, entonces, ¿qué hacen en el país?”.
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