El interés de ambos amigos por lo hecho a mano comenzó en la universidad. Mientras estudiaba, Escobar realizó asesorías con un diseñador internacional y se involucró en el proceso de textiles y artesanías, y conoció a artesanos del altiplano, lo que la motivó a seguir trabajando con ellos.
Por otra parte, Quintana participó en un intercambio estudiantil en Colombia y se dio cuenta del valor que en ese país le dan a las artesanías. Pensó en utilizar esa idea en el país, ya que deseaba cambiar el concepto que sobre lo artesanal existe en Guatemala.
Cuando los amigos se graduaron, decidieron formar una empresa de consultoría de diseño de productos a diferentes entidades. “En 2006 comenzamos con el emprendimiento, que tenía como objetivo diseñar colecciones de productos a diferentes artesanos de todo el país”, comenta Escobar.
Tres años después, los emprendedores deciden comenzar con la marca de accesorios hechos a mano, Estilo Quetzal.
“Nuestros productos son diseñados con técnicas artesanales, queremos que nuestros accesorios reflejen algo guatemalteco pero a la moda, que al usarlo se vean las tendencias, pero con técnica guatemalteca”, señala Quintana.
Los empresarios comenzaron con accesorios para mujeres, con el tiempo fueron evolucionando y empezaron a diseñar productos para hombres, los cuales fueron muy bien aceptados por los clientes.
Recuerdan que su primera colección era de seis bolsas; en la actualidad presentan una al año con dos o tres líneas, con hasta 30 productos para hombres, mujeres y ambos sexos.
Los diseñadores y creadores ahora hacen collares, ropa, pulseras, maletines y textiles. entre otros.
“Queremos convertir Estilo Quetzal en un estilo de vida”, aseguran.
Según ambos, lo que los caracteriza es que diseñan la tela con colores de moda, usan tendencias de texturas, identifican hilo, patrones en las telas, diseñan la tela y el producto y además utilizan iconografías nacionales.
El éxito que hoy en día disfrutan los emprendedores necesitó de mucha creatividad y perseverancia, pero también hubo momentos de retos. “Se nos dificultó identificar el mercado, fue a prueba y error, cuando se trabaja elaborando producto se invierte en dinero, muestras y producción, y en ocasiones no es lo que esperas”, afirma Escobar.
Los emprendedores se catalogan como guatemaltecos que valoran la diversidad cultural, la cual difunden por medio del diseño y desarrollo de productos, ofreciendo una variedad de opciones de alta calidad en productos realizados a mano.
Además, muestran la historia que hay de detrás de los productos para que los usuariosconozcan el valor que hay en ellos. “La técnica artesanal no es sinónimo de barato. Mantenemos el precio justo con los artesanos y mezclamos con otros materiales para mantener un precio accesible al consumidor”, finaliza Escobar.
Estilo Quetzal presentó su colección “Raíces”, llena de colores y texturas.
