El jugador alemán fue intervenido quirúrgicamente y tuvo que ser sometido a una serie de quimioterapias, durante casi seis meses, para poder superar este episodio oscuro. Cuando Russ fue diagnosticado, su equipo se jugaba la permanencia en la Bundesliga y a pesar de la triste noticia, pidió jugar un partido crucial frente al Nureberg; para su mala fortuna, anotó un autogol, pero finalmente su equipo no perdió la categoría.
Happy news for your #Friday, @eintracht_eng's Marco #Russ has been given 👍 from doctor to resume training after successful cancer treatment! pic.twitter.com/Mbm7EjjFSg
— Bundesliga English (@Bundesliga_EN) October 21, 2016