González (1) viajó a la caja de bateo en el segundo episodio a enfrentar los disparos del abridor Kyle Hendricks y al cazarle la bola la desapareció del campo cuando el lanzador no había sacado ni un “out” en la pizarra.
El toletero mexicano conectó de vuelta entera mandado la pelota a volar 390 pies por todo lo alto del jardín central y descontrolando la serpentina de Hendricks, que después del castigo de poder de González resistió solamente dos episodios y un tercio más trabajando sobre el montículo.
El primera base de los Dodgers tuvo tres viajes a la caja de bateo y conectó una vez, con el que definió la pizarra del juego en favor de su novena, y dejó en .429 su promedio de bateo en lo que va de la fase final.
Para González es el primer vuelacercas en la serie por el título del Viejo Circuito, pero es el segundo desde que inició la fase final.
El mexicano lidera la Liga Nacional en ese apartado junto con su compañero de equipo, el novato Corey Seager (2), la gran revelación del equipo.
La batería de los Cachorros tuvo al segunda base puertorriqueño Javier Báez que enfrentó tres veces la serpentina de los Dodgers y conectó en una ocasión, dejando en .429 su promedio con el bate.
El segundo y último imparable de los Cachorros lo conectó el receptor venezolano Willson Contreras, que también en tres viajes a la caja de bateo hizo contacto con la pelota una vez y puso en .333 su promedio de bateo en la fase final.
Ambos pegaron imparables consecutivos en el quinto episodio sobre los lanzamientos del abridor, el zurdo estelar Clayton Kershaw, que se quedó con la victoria.
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— Los Dodgers (@LosDodgers) October 17, 2016
La conexión puertorriqueño-venezolana de Báez y Contreras mantuvo la efectividad de la batería latinoamericana de los Cachorros, pero esta vez fue insuficiente para acreditarse el triunfo.
El bateador emergente venezolano Miguel Montero se fue de 1-0 sólo una noche después de que fue el jugador estelar del partido al conectar el grand slam que definió el primer triunfo de los Cachorros.