Pérez se inició en las artes marciales a los dos años, pues su padre y su hermano mayor también practican esa disciplina, y se han convertido en su principal inspiración para ser un deportista destacado.
Compromisos
El karateca se alista para una serie de compromisos en Guatemala y en el extranjero, por lo que debe distribuir su tiempo entre la escuela y los entrenamientos.
Su próxima participación será el 7 de octubre en la Copa Tecún, en la capital, un evento organizado por la Asociación Mundial de Kick Boxing, donde buscará destacar entre los mejores karatecas de la región. Además, la última semana de este mes competirá en un torneo panamericano, en México.
De acuerdo con los padres de Pérez, las participaciones internacionales que su hijo ha tenido han sido financiadas con fondos propios, pues consideran que tiene un alto potencial para obtener buenos resultados para Guatemala.
“Me siento feliz por la trayectoria de mi hijo, pues se esfuerza para destacar en un deporte en el que se requiere de mucha entrega. A su corta edad ya posee cinta negra, algo que muy pocos karatecas consiguen”, afirmó Édgar Pérez, padre y entrenador del karateca.
“Es el único niño con cinta negra que tengo a mi cargo, y eso es una gran responsabilidad para él, pues ahora debe prepararse para las competencias en México y Guatemala”, explicó el entrenador.
“Me ha costado sobresalir, y no lo hubiera logrado sin la ayuda de mi familia, quienes me instan a buscar ser el mejor en lo deportivo”, dijo el joven atleta, quien añadió que entrena los lunes, miércoles y viernes, de 18 a 19 horas.
Ejemplo
Víctor García, otro karateca, señaló que la trayectoria de Pérez lo motiva a entrenar fuerte, pues ha demostrado que con entrega es posible alcanzar las metas.
“Aprendemos de todo lo que él —Pérez— hace, y cada día perfeccionamos nuestras técnicas en busca de destacar en las artes marciales, afirmó García.