El salto fue enorme porque pudieron hacer realidad parte de sus sueños. Sentir el rugir de los potentes motores, estar en el interior de un vehículo sobre la pista y desafiar a los mejores pilotos “es algo indescriptible”, expresó Gabriel, el menor de la dupla Ramos.
Su estreno, el pasado 31 de julio, fue de lo mejor, ya que en su vehículo Porsche GT3R finalizaron en el primer lugar con un total de 14 puntos.
“La pasión por los carros viene desde que éramos niños. Siempre tuvimos el sueño de poder competir. Somos un equipo novato. De la categoría Mini dimos el salto a la GT1. Estamos corriendo en un Porsche 997 GT3R. Es un carro bastante confiable, competitivo, vino de Europa hace un año. Confiamos en que podemos hacer un buen papel”, expresó Gabriel.
Correr en el Autódromo juntos, más que un deporte y un reto, es una pasión.
“En la primera fecha todo se dio para que ganáramos y esperamos correr con la misma estrella este domingo. Sabemos que hay pilotos muy experimentados y por eso la competencia se vuelve más intensa”, refirió Gabriel.