La audiencia se desarrolló este martes y Escobar reconoció haberse sentido amenazada por Rivera, razón por la cual grabó la conversación que sostuvo con el entonces diputado, donde se evidenció las presiones para favorecer a Baldetti.
Baldetti había sido separada de la Secretaría General del Partido Patriota por el Tribunal Supremo Electoral, que prohibía que la vicepresidenta también representara una organización política.
Rivera se reunió con Escobar para ofrecer el apoyo del Partido Patriota para la elección de la nueva Corte Suprema de Justicia, donde Escobar aspiraba un puesto, a cambio la entonces magistrada de Apelaciones debía apoyar a Baldetti y fallar a su favor, para mantener ambos cargos.
Según Escobar, luego de recibir la solicitud de amparo presentada por el PP, a favor de Baldetti, percibió tensión, la que explicó este martes “era una presión por elecciones”.
“Estaba indignada porque lo que nos pedían era un atropello”, dijo Escobar durante su declaración.
Según Escobar, la denuncia la hizo ante la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (Cicig), porque dudaba de la imparcialidad del Ministerio Público, al tratarse de un expresidente del Congreso y del Partido Patriota, con amplio poder en instituciones del Estado en ese entonces.