Los usuarios se quejan que para cualquier tipo de trámites han tardado horas en las filas antes de lograr entrar a las agencias, y volver a esperar su turno para ser atendidos en la ventanilla respectiva. La espera en las filas ha llegado a ser hasta más de cinco horas según quejan de usuarios entrevistados por Prensa Libre, durante visitas a las agencias como Galerías Primma y Zona 9, además de San Rafael.
La SAT informó que con la vigencia del Decreto 4-2012 (Ley Antievasión II) se implementaron algunos cambios significativos que implican la necesidad de que los contribuyentes lleguen a nuestras agencias y oficinas tributarias. Dentro de ellos, las modificaciones relacionadas al pequeño contribuyente, en cuanto a la autorización de sus nuevas facturas para tenerlas listas a mas tardar el 25 de mayo, y a la emisión de solvencias fiscales para los contribuyentes exentos para que las donaciones recibidas puedan ser consideradas como gastos deducibles.
Al ser consultados si la SAT esta preparada para atender tan alta demanda debido a cambios en las leyes de impuestos u otros cambios de logística interna respondieron que “Hay que tomar en cuenta que el período de entrada en vigencia de las nuevas leyes fue corto, en contraposición a otros ejercicios legales como la Ley Antievasión I, que contó con dos meses previos para la entrada en vigencia”.
Por aparte, en en el corto plazo la SAT ampliará los horarios, incluyendo algunas agencias que estarán abriendo a partir de las 7 de la mañana, y temporalmente se está incrementando el número de personas que pueden atender en las agencias, se anunció.
En el mediano plazo, en la capital ampliarán el servicio en algunas agencias como la de la zona 9, y evalúan abrir otra agencia en el sector de la zona 4 o zona 1,
Mientras que en el resto del país se reacondicionarán algunas agencias como la de Cobán. Aunque aclaran que estas últimas acciones que se evalúan dependen del presupuesto disponible.
Aparte de las largas filas que se han formado en semanas recientes, los contribuyentes también se quejan que se límita el número de formularios que les venden, que quitaron las ventanillas específicas para tramitadores.
Agregan que han cerrado pequeñas agencias y concentrado en megaagencias la atención, y que desde hace varios meses sólo el contribuyente o una tercera persona como el contador o tramitador autorizado pueden hacer las gestiones, y ya no pueden hacer los trámites un familiar autorizado por una carta de contrbiuyente.
