El juez Mynor Mauricio Moto se presentó este jueves al asentamiento para efectuar del desalojo, pero las familias se negaron a abandonar sus casas, pues aseguran que tienen 10 años de radicar en ese lugar y no tienen un nuevo sitio a donde ir.
Con pancartas y en grupo, los habitantes del asentamiento solicitaron al juez una semana para poder reubicarse. Incluso una de las vecinas apeló a la ayuda del presidente Jimmy Morales, y le recordó que “su madre es mamá soltera”.
Unos 600 agentes de la Policía Nacional Civil y de las Fuerzas Especiales Policiales llegaron al lugar en espera que el retiro voluntario, caso contrario según el juez, se utilizará la fuerza. Según Moto, el desalojo debía hacerse efectivo desde hace dos meses.
Los Bomberos Municipales y delegados de la Procuraduría de los Derechos Humanos se hicieron presentes para evitar incidentes o actuar en caso sea necesario.
Momento en que las FEP ingresan al área que será desalojada. pic.twitter.com/RYx610csbD
— Bvasquez_pl (@Bvasquez_pl) September 8, 2016