“No, este no es mi hijo”, recordó haberles dicho a empleados de JetBlue. “Estaba volviéndome loca”.
Su abogado, Sanford Rubenstein, dice que el menor desconocido tenía que ir a Boston.
En vez de eso, el hijo de Martínez, Andy, fue enviado allá y a la aerolínea le tomo tres horas averiguar dónde estaba el menor y llevarlo con su madre.
“Pensé que lo habían secuestrado”, dijo Martínez. “Pensé que no lo vería nunca más”.
Ambos menores tenían 5 años, viajaban solos y habían abordado el avión en República Dominicana.
Martínez dijo que su hijo llevaba su nombre escrito en una banda puesta en la muñeca. Sin embargo, el otro niño llevaba el pasaporte de Andy.
El niño que fue a dar por error a Nueva York fue llevado a salvo a Boston, dijo la aerolínea.
JetBlue está averiguando cómo ocurrió la confusión.
Dice que una vez que los empleados se dieron cuenta del error, rápidamente llevaron a los menores a sus destinos correctos.
La aerolínea dice que ambos menores siempre estuvieron supervisados por sus empleados. Reconoce que la situación “fue angustiosa para las familias”.
Martínez viajó con su hijo el 28 de julio durante una vacación familiar.
Ella regresó a casa en Manhattan una semana después, dejando a Andy con unos familiares. Al comprar su boleto, Martínez pagó US$100 adicionales para que un representante de JetBlue lo acompañara al avión.
Cuando Andy habló por teléfono habló con su mamá después que lo encontraron, le dijo “Mami, me pusieron en otro avión”, dijo Martínez al diario.