“Pienso que no hay ninguna razón de querer atacar a Guardiola tras su marcha. Hemos ganado mucho con él, también nos hemos beneficiado mucho de él. Querer vengarse a posteriori es inútil”, declaró Rummenigge a la cadena de televisión pública bávara BR.
Franck Ribery había aprovechado esta semana durante la gira de preparación del Bayer Múnich en Estados Unidos para arremeter contra el técnico español, con quien mantuvo una relación distante durante tres años.
El futbolista galo reprochó a Guardiola su “falta de experiencia”, como entrenador, acusándolo de “hablar demasiado” para preparar los partidos e implícitamente de no estar tan cerca de sus jugadores.
Ribery aseguró que su situación es inversa con Ancelotti y que está liberado desde su llegada.
Sin embargo, el ex entrenador del AC Milan y del Real Madrid transmitió al francés, en el encuentro disputado en Charlotte, que no dispondrá de ningún trato a favor.
Ancelotti pidió a Ribery que se calmara en la primera parte del partido, después de que el galo tuviera varios enfrentamientos con aire amenazante contra el centrocampista brasileño del Inter de Milán, Felipe Melo.
“No me gustan los jugadores que se comportan de esta manera. Le dije que lo mejor sería que parara con eso”, dijo el técnico italiano a la prensa teutona tras el partido.
“Le designé hoy como capitán y no es posible”, refiriéndose al comportamiento adecuado cuando se lleva el brazalete, prosiguió Ancelotti.