Los agentes judiciales encontraron en ese domicilio “casquillos percutidos y ojivas”, y según testigos “los agresores llegaron en una camioneta para disparar de manera directa con armas de calibre restringido” contra las cinco víctimas, acotó la fiscalía sin dar más detalles.
Una fuente de esa misma institución judicial dijo que las víctimas eran el hermano y el hijo de un funcionario de la alcaldía de Coatzacoalcos y su escolta, integrada por dos exmilitares retirados y un expolicía.
“Se encontraban en una fiesta que se realizaba en la casa de uno de los finados en el puerto de Veracruz, cuando llegaron sujetos fuertemente armados que los agredieron directamente”, añadió esa misma fuente que pidió el anonimato por no contar con autorización para hablar del tema.
Veracruz es un estado con importantes inversiones en la industria del petróleo y la petroquímica, azotado principalmente por el sanguinario cártel de los Zetas que se ha dedicado, entre otras actividades criminales, a la extorsión y al secuestro, en especial de emigrantes que ingresan ilegalmente al país para dirigirse a la frontera con Estados Unidos.
