El grooming consiste en que un adulto intente persuadir a un niño a fin de generar una conexión emocional y un ambiente de confianza para que realice actividades sexuales.
A continuación, ESET comparte 10 consejos para que los menores puedan para enfrentar los riesgos en Internet:
1. Hablar abiertamente con los niños sobre el acoso cibernético, que es algo muy común, por lo que los padres deben asegurarse de que sus hijos acudan a ellos cuando tengan problemas, en vez de ocultarlos. Se les debe explicar lo peligroso que es y asegurarse de que nunca respondan mensajes o llamadas de origen desconocido.
2. Establecer un vínculo de confianza entre los padres y los menores, al constuir un canal de comunicación de forma que se puedan conocer los hábitos y preferencias al navegar por Internet.
3. Dejar claro cuáles son los lugares permitidos para utilizar el dispositivo, así como el tiempo de utilización y qué puede hacer durante este tiempo.
4. Es muy importante hacer hincapié en la importancia de mantener los datos en privado. En el smartphone toda la información almacenada (fotos, videos, mensajes, entre otros) podría volverse pública en Internet.
5. La opción de GPS del dispositivo es muy útil para ubicarse, pero se debe utilizar con precaución, ya que mantenerlo siempre encendido permitiría que a través de las redes sociales puedan saber la ubicación del menor.
6. En el caso de las cámaras web incorporadas en las computadoras personales hay que ser precavido, pues los ciberdelincuentes usan un malware llamado R.A.T. (herramienta de acceso remoto, en inglés) para espiar a sus víctimas a través de las cámaras. Si es posible, deshabilitar o desconectar las cámaras web de las computadoras que usan los niños (o pegar un pedacito de cinta sobre el lente) y asegurarse de tener actualizado el programa antivirus.
7. Las aplicaciones maliciosas están también presentes en ambientes móviles. Además del uso de sistemas para la protección de los datos, no se deben descargar aplicaciones de sitios no oficiales y antes de instalar cualquier aplicación, tener en cuenta qué permisos son solicitados. Además, el menor debe acompañarse de un adulto para estar seguro de cómo funciona el proceso.
8. Los juegos en línea suelen contener lenguaje obsceno y abusivo, y los dispositivos, como las consolas de juegos, pueden traer incorporados navegadores web. Es importante asegurarse sobre cuáles son los aparatos que usan los niños para conectarse a Internet, y usar controles parentales.
9. Es importante crear cuentas de usuario separadas para los hijos. Aunque puede ser tentador crear una sola cuenta de usuario de Windows para toda la familia, si cada uno tiene su propia cuenta, es más fácil hacer un seguimiento de cómo cada integrante usa la computadora. Además, si se tiene más de un hijo, esto le permitirá a los padres personalizar el nivel de protección que cada uno pueda necesitar.
10. Muchos adolescentes les mienten a sus padres sobre lo que hacen online, por lo que es recomendable vigilar los navegadores “adicionales” instalados en la PC. Una verificación periódica de los programas instalados permitirá ver si el menor agregó alguno nuevo.
Para más información sobre consejos para proteger a los menores en Internet, ingresar en https://www.academiaeset.com/