Sin embargo, la fuente reconoció que en este traslado “se dio prioridad a los reos que pudieran ser antagónicos al grupo de el Chapo (el llamado csrtel de Sinaloa), precisamente para evitar alguna convulsión adentro” del penal, precisó la fuente sin mencionar la banda al que pertenecen los reclusos enviados a otras cárceles.
El funcionario señaló que el Cefereso 9 es al mismo tiempo una cárcel de mediana y alta seguridad por lo que entre sus reos están “mezclados algunos de alta peligrosidad”.
Guzmán, quien se ha fugado dos veces de prisiones de máxima seguridad mexicanas, fue trasladado sorpresivamente la madrugada del 7 de mayo de la cárcel del Altiplano, a 90 km de la capital, a la de Ciudad Juárez, fronteriza con Estados Unidos.
Desde entonces permanece aislado en una celda de la que se ha quejado por la falta de higiene.
El líder del poderoso cartel de Sinaloa fue recapturado en enero pasado tras una espectacular fuga en julio del 2015 a través de un túnel de más de 1.5 km que mandó cavar desde el exterior hasta su celda y que atravesó en una motocicleta adaptada para rieles.
El traslado del capo se realizó unas horas después de que un juez fallara el viernes favorablemente al pedido de extradición de una corte de California por el delito de tráfico y distribución de cocaína, un proceso que la cancillería mexicana analizará en las próximas semanas.