“Se ha tenido que lamentar la muerte del varón, de 50 años, y la mujer de 45 años quedó herida”, señaló el jefe policial.
El cuerpo del minero fue llevado a la morgue, mientras que la mujer, identificada como Leonarda Villca, recibe atención médica en el Hospital General de Oruro.
Villca aseguró que su expareja había amenazado con matarla si no volvía con él.
La mujer señaló que intentó escapar, pero el hombre la atrajo hacia él, y no recuerda lo que sucedió luego de la explosión.
Otro caso
El pasado 26 de abril otro hombre se suicidó con cartuchos de dinamita en la ciudad andina de Potosí, supuestamente porque su esposa se negó a darle dinero para bebidas alcohólicas.
Además, un hombre de 86 años murió el pasado 1 de mayo al estallarle en la mano una dinamita que manipulaba durante un desfile por el Día del Trabajo en el pueblo de Achacachi, en el altiplano de La Paz.
Ese mismo día, el presidente Evo Morales anuló con un decreto otra norma vigente desde el 2012 que prohibía el uso de “bombas, materias explosivas, inflamables, asfixiantes, tóxicas u otros materiales relacionados” en movilizaciones sociales.
El Gobierno boliviano había prohibido el uso de dinamita en las movilizaciones sociales luego de la muerte de un minero provocada por un explosivo lanzado contra una sede sindical en La Paz por un grupo de manifestantes.
Los mineros bolivianos no solo tienen la costumbre de usar dinamita en sus manifestaciones, sino que la emplean para enfrentarse entre ellos cuando se disputan un yacimiento o contra los policías cuando tienen conflictos, lo que ha causado otras víctimas.
