Diversos manifestantes recordaban que durante ese gobierno se produjeron más de 300 mil esterilizaciones forzadas a mujeres pobres de los Andes, se vendieron empresas públicas por más de US$9 mil millones y hubo malversación de hasta US$600 millones, según datos calculados por Transparencia Internacional en el 2004.
En la ciudad de Cusco universitarios y sindicalistas llevaron un enorme cartel rojo que en letras amarillas decía “fujimorismo nunca más” mientras otras protestas se producían en ciudades de la costa del Pacífico, de los Andes y de la Amazonía.
El periodista Gustavo Gorriti dijo a una televisora que asistía a la manifestación por la “fidelidad en el sistema fundacional de la República, estar aquí significa defender la democracia de quienes la atacaron”.
Gorriti, un reconocido periodista investigativo, fue secuestrado el 5 de abril de 1992 por agentes de inteligencia al servicio de Fujimori y su asesor Vladimiro Montesinos
Keiko Fujimori, de 40 años, anunció el lunes que el martes iban a suspender sus actividades y cerrar los locales de su partido para evitar confrontaciones.
El domingo durante un debate presidencial firmó un papel donde enumeró una serie de compromisos para garantizar los derechos humanos en caso sea elegida presidenta y repudió el autogolpe ejecutado por su padre.
“Ella fue la primera dama de un régimen criminal que acabó con la vida de nuestros familiares además de cometer otros delitos graves de corrupción”, dijo Gisela Ortiz hermana del estudiante Luis Ortiz —asesinado por un escuadrón militar que actuaba con conocimiento de Fujimori— meses después del autogolpe junto a ocho estudiantes y un maestro universitario.
En la víspera el presidente Ollanta Humala dijo en una entrevista con la televisora Frecuencia Latina: “Me da satisfacción que miles de jóvenes salgan a marchar a afirmar la democracia”, pero el martes, acusado de imparcialidad, precisó que sus declaraciones no habían manifestado preferencia u oposición por algún candidato presidencial específico.
La noche del 5 de abril de 1992 el entonces presidente Fujimori, que no tenía mayoría parlamentaria, anunció el autogolpe en un mensaje televisivo y con esa medida obtuvo el control de los tres poderes del estado, dejó en suspenso la constitución de 1979 que estaba vigente en esa época y luego convocó a nuevas elecciones parlamentarias.
El domingo unos 23 millones de peruanos irán a las urnas para elegir un nuevo presidente.
Si ningún candidato logra el 50% más uno de los votos, se realizará una segunda vuelta entre los dos más votados el 5 de junio. El ganador reemplazará al presidente Humala el 28 de julio.