Edmond Mulet del Partido Humanista con 84 votos, Manuel Villacorta de Movimiento Winaq, 49; e Isaac Farchi de Visión con Valores (Viva), 36, son los inmediatos perseguidores de los primeros lugares.
Los 19 candidatos en contienda obtuvieron al menos un voto.
Cabe destacar que Thelma Cabrera no viajó ni una sola vez a EE. UU. contrario a otros candidatos que participaron en fotos y debates, en los cuales expusieron sus planes de gobierno, pero en donde también se cruzaron serios señalamientos.
¿Pero, qué fue lo que atrajo el voto para la candidata del MLP?
Algunos migrantes consultados refieren que, al ser Cabrera una candidata que representó en las elecciones a los sectores indígenas, sintieron empatía con la coyuntura actual en la cual miles de guatemaltecos originarios de esos pueblos se han visto forzados a migrar a EE. UU., por lo cual la aspirante por el MLP se perfiló como alguien que impulsar políticas en favor de esos pueblos.
“Puede ser el hartazgo de los guatemaltecos en Estados Unidos con la clase política actual, que ya está cansada de lo mismo”, refirió René Corado, un guatemalteco que se dedica al cuidado de un museo de aves en California y quien prefiere mantener en secreto a qué candidato dio su voto.
Para tratar de explicar por qué el apoyo a Cabrera, otro connacional que votó indicó que este pudo deberse a que los guateamaltecos en EE. UU. que tuvieron la oportunidad de emitir su sufragio al menos trataron de informarse de la oferta electoral, ideologías de los candidatos y principales propuestas de gobierno.
Walter Batres, dirigente de la Red Migrante Guatemalteca, serio crítico de la forma cómo se implementó el proceso del voto en el extranjero, expuso que por lo menos en California, estado donde reside la mayoría de migrantes connacionales, hay muy poca simpatía por los partidos UNE y Vamos, que postularon a Sandra Torres y Alejandro Giammattei como candidatos a la presidencia, y que al final de cuentas serán quienes disputen al segunda vuelta electoral.
“Los migrantes siempre aplaudimos la participación de la gente de provincia como la candidata Cabrera”, indicó Batres, quien destacó que es una mujer de perfil sencillo “como la mayoría de gente en Guatemala”; no obstante, lamentó que no haya aceptado la invitación al debate que organizó el Foro Migrante Guatemalteco.
Según Batres, Thelma Aldana, Zury Ríos y Edwin Escobar gozaban de mayor aprobación por parte de los guatemaltecos en aquel país, pero fueron descalificados y la gente ya no participó, por lo cual el alto ausentismo podría explicar la inclinación hacia el MLP.
Añadió que, en efecto, una gran cantidad de migrantes que radican en California son indígenas que han migrado de las áreas rurales de Totonicapán, San Marcos y Huehuetenango.
Poca participación
Las elecciones generales del 2019 pasarán a la historia como las primeras en que fue posible emitir el voto en el extranjero, y aunque miles de migrantes no pudieron ejercer su derecho cívico, el TSE calificó el evento de positivo. Independientemente de esa situación hay una realidad innegable: cada sufragio costó miles de quetzales.
De acuerdo con información proporcionada por el Tribunal Supremo Electoral (TSE), son cerca de Q47 millones los que se requirieron para implementar el voto en el extranjero. Estos recursos se asignaron en el presupuesto 2019, y pese a que para el ejercicio fiscal 2018 se habían asignado Q25 millones se utilizó muy poco de estos recursos.
Una fuente financiera del TSE indicó que es casi seguro que, aunque a la fecha no se ha ejecutado todo el presupuesto para este fin, sí se gastarán los Q47 millones en su totalidad, lo que representaría que cada voto de los guatemaltecos en EE. UU. se emitió a un costo de Q64 mil 32, aproximadamente.
Contenido relacionado
> TSE adjudicará cargos hasta que se agoten procesos judiciales
> Elecciones generales: Cómo será la transición hacia el nuevo gobierno, según Segeplan
> Empleados del Organismo Judicial gozan de doble asueto por las elecciones y el Día del Padre