Steelers contra Broncos
Peyton Manning, quien se perdió más de seis juegos de campaña regular debido a una lesión en el pie, llega al duelo del domingo en Denver como el mariscal más saludable, luego de que su contraparte de los Steelers, Ben Roethlisberger terminara el partido de comodines con una separación y ligamentos rotos en el hombro derecho. Sin embargo, Roethlisberger quiere estar presente y de él depende mucho del accionar de Pittsburgh.
“Por supuesto que quiero estar allí con los muchachos”, comentó Roethlisberger. “Pero siempre lo he dicho, tampoco voy a perjudicar al equipo” .
Cuando ambos equipos se midieron en la semana 15, Roethlisberger comandó una remontada de 14 puntos en la segunda mitad con lo que Pittsburgh derrotó 34-27 a Denver. En esta ocasión, habrá muchas diferencias. Primero, Manning será el encargado de llevar la ofensiva de Denver y no el inexperto Brock Osweiler. Segundo, Roethlisberger, en caso de participar, lo hará definitivamente limitado. Y tercero, el estelar “wide receiver” de Pittsburgh, Antonio Brown, quien en aquel encuentro finalizó con 189 yardas y dos touchdowns, también está en duda tras sufrir una conmoción en los segundos finales del triunfo ante Bengalíes.
Denver, primer preclasificado en la AFC, terminó la campaña como la mejor defensiva total en yardas, y yardas aéreas admitidas, pero tuvo su peor actuación de la temporada precisamente ante Pittsburgh. En su beneficio, los Broncos lideran 4-3 en duelos directos de postemporada y han ganado cuatro de los últimos seis ante Pittsburgh, quien en 2005 se convirtió en el primer equipo en ganar el Super Bowl desde el sexto sitio de su conferencia y busca repetir la hazaña.