Las mediciones de diciembre fueron lideradas por los científicos Raúl Cordero y Alessandro Damiani, quienes viajaron hasta la Estación Científica Polar Conjunta Glaciar Unión, en territorio antártico chileno, a unos mil km del polo sur.
Los récords de este año “están probablemente relacionados con las bajas temperaturas de la estratósfera registradas esta temporada y no constituyen necesariamente un cambio de tendencia”, según explicó Cordero en el comunicado de prensa.
El agotamiento o destrucción de la capa de ozono se manifiesta más claramente en latitudes altas, particularmente en la Antártica, durante la primavera austral.
Tras las limitaciones internacionales adoptadas a la emisión de sustancias destructoras de ozono, los científicos esperan una recuperación de la capa de ozono para mediados de este siglo.
El Protocolo de Montreal, firmado en 1987, estableció la prohibición progresiva de los clorofluorocarburos (CFC) , sustancias que agotan la capa de ozono (barrera gaseosa situada a entre 20 y 50 kilómetros de altitud, que protege la Tierra de los rayos solares ultravioletas) .