La actividad dentro de la economía en general también se desaceleró en noviembre, de acuerdo con una encuesta publicada por la empresa de información financiera Markit.
La salud del sector turístico es fundamental para el centro de París, ya que emplea a casi 200 mil personas de una población de apenas poco más de dos millones. Más de 22 millones de personas se hospedaron en los hoteles en 2013, la última cifra disponible del gobierno.
El turismo a la capital francesa ya había sido golpeado a inicios de este año luego de los ataques de extremistas islámicos contra una revista satírica y un mercado judío en enero. El número de estancias en hoteles cayó 3,3% en el primer trimestre del año.
El primer ministro Manuel Valls se reunió con representantes de las operadoras turísticas, agencias de viaje, hoteles y restaurantes, así como empresas de viaje tales como Air France, para encontrar un plan a corto plazo que impulse a la industria.
En el encuentro también se buscaría la manera de adaptar la comercialización de París como un destino vacacional para los turistas que temen que se repitan los ataques que mataron a 130 personas y dejaron a cientos más lesionadas.
Aun cuando las aerolíneas operaron sus calendarios normales de vuelos hacia y desde París, muchos viajeros con planes de visitar la capital francesa han reconsiderado sus opciones, una señal preocupante para las industrias de transporte y turismo.
Los economistas dicen que los ataques de este tipo tienden a tener un impacto a corto plazo, pero que el turismo tiende a recuperarse.