Este jueves los diputados deberán concluir el debate que comenzaron el martes, en medio del rechazo de varios parlamentarios que defendían que no hubiera cambios tan radicales.
El hemiciclo aprobó 38 de los 43 artículos que tendría la ley.
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1 ) Tasas de interés
La mayor oposición existía en la tasa de interés. La propuesta actual es que las tasas de interés anual no deberán exceder el doble del último valor de la tasa de interés anual activa promedio ponderada del sistema bancario.
La tasa más reciente publicada por el Banco de Guatemala, es de 13.13%. Es decir que la tasa que podrían aplicar los bancos en las tarjetas de crédito no debería de sobrepasar el 26.26%.
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2 ) Vigilancia
La iniciativa también obliga a la Superintendencia de Bancos a supervisar que los emisores de tarjetas hayan extendido un contrato y que sea cumplido sin cambios posteriores.
El contrato deberá incluir los cobros adicionales que le harán al tarjetahabiente, además de los pagos en los que pudiera incurrir.
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3 ) Modificar préstamo
El usuario también podrá reestructurar su deuda cuando considere que no puede pagar. Es decir, que la entidad bancaria deberá facilitar el pago por cuotas.
La mayor parte de las denuncias es que las deudas llegan a cantidades superiores y para realizar el pago, los clientes buscan cuotas menores.
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4 ) Capitalización
La medida también prohibiría la capitalización de los intereses, el cobro de comisiones, servicios adicionales y otros cargos.
Eso evitaría que las deudas aumenten extraordinariamente, porque los intereses serían cargados sólo a la deuda inicial del cliente y ya no pagaría interés sobre interés, como sucede en la actualidad.
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5 ) Delito
También se crearía el delito de la clonación de tarjetas de crédito, ante las constantes denuncias y que incluso en los cajeros automáticos son colocados aparatos para duplicar las tarjetas de los usuarios.
Las penas contempladas son de prisión de 10 años y multas de Q50 mil hasta Q500 mil.
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6 ) Capacidad de pago
La Ley también obligaría a las entidades financieras a realizar una evaluación sobre la capacidad de pago del usuario.
Aunque eso podría complicar los trámites para solicitar un nuevo plástico, es una medida para beneficio del consumidor.
El monto de crédito no podrá sobrepasar el sueldo del tarjetahabiente. Tomando en cuenta que la mayoría de guatemaltecos ganan el salario mínimo, de alrededor de Q2 mil 500, los límites de crédito no superarían los Q5 mil en promedio.