ESCENARIO DE VIDA
Una buena iniciativa
Cada día que pasa, la situación climática se agrava y la generación de gases de efecto invernadero (GEI) nos afecta a todos con las sequías prolongadas, inundaciones, degradación de suelos, fuertes lluvias que ocasionan deslizamientos y la devastación que producen los feroces huracanes y tormentas, aumentando la variabilidad climática. Debido a su posición geográfica y su situación de pobreza, Guatemala está entre los 10 países más vulnerables a los efectos del cambio climático a nivel mundial. En este contexto, reducir las emisiones de gases de efecto invernadero se vuelve imperante.
Por ende, es refrescante saber que ha llegado una iniciativa que respalda los esfuerzos nacionales destinados a reducir los efectos negativos del cambio climático y promueve el desarrollo sostenible de las comunidades dependientes de los bosques. Esta iniciativa tiene nombre y se llama “Clima, Naturaleza y Comunidades-CNCG” e integra a un consorcio de organizaciones lideradas por Rainforest Alliance (RA), que incluyen a World Wildlife Fund (WWF), The Nature Conservancy (TNC), la Universidad Del Valle de Guatemala (UVG), Defensores de la Naturaleza y la Asociación Guatemalteca de Exportadores (Agexport) y apoyado por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid).
¡Qué maravilla saber que podemos unirnos todos para enfrentar un desafío tan grande como lo es el cambio climático, pues aunque creamos que Guatemala es muy pequeña para emitir gases de efecto invernadero (GEI), sí lo hace. Según el Inventario Nacional de Emisiones y Remosiones de GEI para Guatemala-2005, las emisiones que producimos equivalen al 46% gigagramos de dióxido de carbono (CO 2). De esa cantidad, el 46% se le atribuye al sector agrícola, el 28% al sector energía, el 19% a cambio de uso de suelo, el 4% a la industria y el 3% a residuos. En cuanto al IV Informe de IPCC, las emisiones globales de GEI aumentaron 70% entre 1970 y 2004, distribuidas de la siguiente manera: fuentes de energía, 145%; transporte, 120%; industria, 65%; uso del suelo, cambio de uso de suelo y actividad forestal, 40%. El metano también contribuye al calentamiento global y sus principales fuentes provienen del ganado y vertederos.
En el marco de este programa, World Wildlife Fund (WWF) tiene a su cargo específicamente abrir brecha para que Guatemala se encamine a construir una Estrategia Nacional de Desarrollo con Bajas Emisiones, y para ello trabaja apoyando a entidades del Gobierno, como el Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales (MARN) y el Programa Nacional para la Competitividad (Pronacom), la Asociación de Exportadores de Guatemala (Agexport) y organizaciones de la sociedad civil.
Los esfuerzos por reducir emisiones radican, primero, en que Guatemala se convierta en un buen vecino en el concierto de las naciones y responda ante el compromiso que estableció en la XV Conferencia Internacional sobre el Cambio Climático. Estas acciones nos prestigian como un país visionario y atraen apoyo y financiamiento internacional. Son las iniciativas que Guatemala necesita. ¡Enhorabuena!
vidamordepaz@yahoo.com