Las fuentes consultadas por el medio de comunicación indicaron que Google está distribuyendo el nuevo prototipo exclusivamente entre empresas y que la versión para los consumidores puede tardar por lo menos un año en llegar al mercado.
Falta mucho
Según el diario financiero, la empresa con sede en Mountain View California, Estados Unidos, no prevé hacer un lanzamiento oficial del nuevo prototipo.
En lugar de ello, Google ha optado por distribuir el nuevo modelo entre desarrolladores que están creando software para utilizar las gafas en ambientes corporativos.
La versión inicial de las gafas, resultó controvertida porque los usuarios podían grabar vídeos en lugares públicos sin que nadie se diera cuenta.
Google dejó de vender las gafas en enero y reconoció que había sacado el dispositivo al mercado antes de que estuviera realmente listo para los consumidores.
La firma tecnológica espera dar respuesta a las preocupaciones sobre la privacidad con el actual modelo, que se usará sobre todo en ambientes de trabajo.
Según el WSJ, el nuevo modelo incluye un procesador de Intel más rápido, una batería con mayor duración y mejor conectividad inalámbrica.