Por sus propiedades antioxidantes, el licopeno actúa como un potente neutralizador de radicales libres como el óxido y el peróxido, al atenuar los daños oxidativos sobre los tejidos, lo que retrasa el envejecimiento y la degeneración del organismo.
El licopeno se encuentra principalmente en alimentos de color rojo o anaranjado como tomates, pimientos rojos, sandía y papaya, entre otros. Tan solo una taza de tomates frescos contiene 6.7 mg. de licopeno, y si estos están cocinados, contienen más aún, porque el proceso de calentamiento aumenta los niveles de los nutrientes hasta en un 35 por ciento.
Aún no existen pruebas de que el consumo aislado de este nutriente en pastillas o cápsulas mejore la salud o ayude a evitar ciertas enfermedades, por lo que lo más recomendable es aumentar su ingesta a partir de las frutas y hortalizas ricas en este antioxidante.
La empresa guatemalteca Hortabella ha desarrollado una variedad de tomates que contienen 50 por ciento más de licopeno que los convencionales. “Este tomate, que hemos llamado, Lico-Fresh, además de su alto valor nutritivo, tiene una excelente calidad tanto interna como externa y un delicioso sabor. El tomate Lico-Fresh no es transgénico y fue desarrollado bajo técnicas naturales de selección”, comentó el ingeniero Marvin Escobar, gerente general de Hortabella.
