Aunque son muchas las necesidades de estas personas, el joven Coby Persin llevó a cabo un experimento en las calles de Nueva York basado en las siguientes preguntas: ¿a quién le daría dinero?¿a un alcohólico drogadicto o a un padre necesitado?
Experimento
El primer escenario mostró a un indigente con una botella de alcohol cubierta por una bolsa y un cartel que decía: “vagabundo necesita dinero para marihuana, drogas y alcohol”. Frente a él había un vaso para recibir el dinero.
Al menos seis personas se acercaron para colaborar con él. Unos, incluso, exclamaron: “te doy para una botella más grande” o “yo te invito al trago”.
El segundo escenario mostró al mismo hombre, solo que ahora acompañado de una niña y en el rótulo con una leyenda que decía: “padre soltero e indigente necesita dinero para su familia”.
Mientras la niña tosía, las personas pasaban por más de una hora sin brindarle ayuda.
Hasta que llegó una joven que brindó más de lo que podía dar. “Te daré lo poco que he ganado hoy, te servirá más a ti que a mí”. La joven oró para que el indigente tenga comida y dinero para la salud de su hija.
El hombre asombrado se levantó y le dijo que todo era un experimento. “Es increíble lo que acabas de hacer por eso toma este dinero, tú lo necesitas más que yo”, le dijo el joven.
El experimento demostró que las personas con más necesidades son las que resultan ser más colaboradoras y altruistas.