Esta reunión se realiza mientras continúan los ataques de las fuerzas separatistas prorrusas cerca del puerto estratégico de Mariupol.
Un diplomático ucraniano indicó a AFP que “los rusos no querían esta reunión“. Pero “para nosotros es importante mantener la presión política” de Occidente sobre Moscú, agregó.
La reunión fue anunciada el viernes por los mandatarios de Francia y Alemania, Franois Hollande y Angela Merkel.
Kiev y los países occidentales acusan a Rusia de apoyar a los separatistas proporcionándoles armas y tropas, mientras que Moscú niega cualquier implicación en un conflicto que causó más de cinco mil 700 muertos en 10 meses.