“No existe retroalimentación, y ese conocimiento no se transmite a los trabajadores de la SAT así como a los contribuyentes”, añadió.
Juan Carlos Paredes, consultor fiscal, opina que el Directorio refleja inactividad y pasividad que no lo hacen dinámico, y presenta una escasa defensa institucional para lograr los objetivos en la cobranza de tributos.
“Hay un acomodamiento institucional, por lo que es necesario los cambios de los miembros, para volverlo más competente”, expuso Paredes.
Morales expresó que existe una preponderancia al jefe de la SAT, cuando la Ley dice que hay responsabilidad compartida con el Directorio y que es la misma causal para la remoción.
Eso significa que si el jefe de la SAT no alcanza las metas fiscales, los miembros del Directorio también deben ser removidos, agregó.
En los últimos tres años, la SAT no ha logrado alcanzar la recaudación programada y los únicos cambios que han sido removidos son los presidentes del Directorio, que es representado por el ministro de Finanzas y el secretario, que es el superintendente.
El último acontecimiento fue la destitución de Carlos Muñoz, el pasado 5 de enero, por no haber alcanzado la meta en el 2014 y dejado una la brecha por Q2 mil 461 millones.
DIRIGE POLÍTICAS
Rolando Secaida, decano de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de San Carlos, opina que el Directorio solo dicta las políticas para mejorar la recaudación tributaria y alcanzar las metas establecidas.
“No puedo decir si el Directorio es pasivo, porque su trabajo no es salir a las calles a cobrar impuestos. Tal vez los lineamientos son buenos y acordes y no se han logrado cumplir por diferentes circunstancias”, dijo.
Secaida argumentó que no han sabido de evaluaciones a los integrantes del Directorio, a pesar de que los representantes llevan más de 10 años en ello.
En todo caso, Jorge Briz, presidente de la Cámara de Comercio de Guatemala, señaló que las metas de captación de impuestos no se alcanzan porque el sistema de tributación del país es complicado y el Directorio debiera otorgar las condiciones para facilitar el pago.
Los integrantes del Directorio, titulares y suplentes, reciben una dieta de Q2 mil 500 cada uno por cada sesión a la que asistan. A la semana se reúnen dos veces, además de prestaciones como viajes y viáticos para capacitación en el exterior.
FÁGIL DESEMPEÑO
Carlos González Arévalo, analista de la Asociación de Investigación de Estudios Sociales, explicó que uno de los pocos posicionamientos que ha reflejado el Directorio fue a la iniciativa de ley de inversión y empleo y la contratación de una empresa argentina para mejorar la cobranza de impuestos en el 2014.
“El Directorio debiera tener más independencia, como ocurre con la Junta Monetaria”, afirmó.
Dorval Carías, ministro de Finanzas y presidente del Directorio de la SAT, indicó: “La experiencia es innegable, pero muchos años de estar ahí implica que la dinámica es la misma, por lo que se necesita una renovación”.
El Directorio estableció el pasado viernes dos montos de metas de recaudación para este ejercicio, por Q54 mil 701 millones, que es lo establecido en el Presupuesto, y Q53 mil 401 millones, condicionados por la impugnación al impuesto a la telefonía.
DEPURACIÓN DE LISTA
Los integrantes de la comisión de postulación que trabajan en el cambio de directores en la SAT depurarán este
lunes expedientes de candidatos para integrar ese ente colegiado.
La depuración consistirá en determinar quiénes cumplieron con los requisitos establecidos en la convocatoria. Luego se procederá a publicar el nombre de los postulados.
La Comisión recibió 48 expedientes de profesionales en las áreas de Economía, Finanzas y Ciencias Jurídicas, y para los siguientes días se llevará a cabo la selección de ocho candidatos.