En su fallo, la corte dijo que retirar la alimentación e hidratación artificial no violaría la Convención Europea de Derechos Humanos.
La familia de Vincent Lambert no se ponía de acuerdo sobre la conveniencia de mantenerlo con vida con prácticas artificiales. Su esposa quería que los médicos dejaran de ofrecerle soporte vital pero sus padres estaban en contra.
“No hay alivio, no hay alegría que expresar. Solo queremos que se cumpla su voluntad”, dijo la esposa, Rachel, a periodistas tras el fallo del tribunal de Estrasburgo.
Pero Jean Paillot, abogado de los padres, expresó una “gran decepción” y pidió a los médicos que vuelvan a evaluar la condición de Lambert y “tomar una nueva decisión médica”, señalando que la decisión se tomó por primera vez en enero del 2014.
La eutanasia no es legal en Francia, pero algunas leyes permiten a los médicos detener los tratamientos en ciertos casos, después de un complejo proceso que incluye consultas con la familia.
Muchas encuestas recientes han mostrado que una enorme mayoría de franceses está a favor de legalizar la eutanasia, la cual por el momento sólo está permitida en Holanda, Bélgica y Luxemburgo.