Los responsables dijeron que se ceñirán a su primera elección porque no se han recibido protestas de la familia real británica.
La polémica del nombre comenzó el miércoles cuando el popular zoológico Takasakiyama puso a un mono recién nacido el nombre de Carlota, el elegido en una votación pública.
Inmediatamente después que anunciar la decisión, el zoológico recibió innumerables protestas de algunos japoneses diciendo que era una falta de respeto a la realeza de Gran Bretaña.
El alcalde de Oita, Kiichiro Sato, respaldó la decisión el viernes diciendo que Carlota es un nombre “muy bonito”.