Pero hacía seis meses que Rob Kuznia, uno de los tres periodistas premiados por esta investigación, había dejado de trabajar como reportero dado que su salario no le alcanzaba para pagar su alquiler.
Según el sitio LA Observed, que dio a conocer este hecho el lunes, Kuznia dejó la publicación y pasó a trabajar como asistente de prensa en la fundación USC Shoah.
“Hemos hablado con él esta tarde y reconoció con dolor que lamentaba no ser más periodista, pero explicó que era demasiado difícil llegar a fin de mes con su salario en el diario y alquilando un apartamento en la región de Los Angeles”, escribió el LA Observed.
El exreportero de 39 años también explicó a The New York Times -que fue premiado el lunes con tres Pulitzer- que antes de dejar su puesto, había recibido un aumento. “No quiero que esto dé a pensar que no estaban al tanto. Pero simplemente no alcanzaba”.
Consultado por el diario, aseguró que no volvería a ejercer el periodismo.
El sitio LA Observed precisó por su parte que The Daily Breeze había ganado la semana pasada otro premio en periodismo de investigación, el National Headliner Award for Investigative Journalism.