?Curiosamente, en diciembre el flujo de vehículos se reduce de un 15 a un 20 por ciento en relación al resto del año, pero se producen muchos congestionamientos porque los vehículos se concentran en los mismos puntos?, explica Héctor Morales, director de Comunicación Social de la Municipalidad capitalina.
Estudios de tráfico efectuados por la comuna revelan que los congestionamientos se producen en las salidas de los centros comerciales, pues se llenan los parqueos y los vehículos forman largas filas sobre la calle, ocupando el carril derecho.
También influyen las ventas callejeras, las cuales ocupan banquetas y obligan al peatón a caminar sobre la calle.
Otro motivo es que los comercios hacen rotación de inventario de mercadería, con ello a toda hora hay camiones estacionados en la calle, descargando productos, sin importar las prohibiciones de tránsito. ?Igual influye la actitud de los pilotos de autobuses, al efectuar paradas no autorizadas, cerca de centros comerciales, con lo cual obstruyen el paso vehicular?, explica Morales.
El aguinaldo
Según los análisis de tránsito, los congestionamientos empiezan a partir del 14 de diciembre, al coincidir con los pagos de aguinaldo; continúan el 15, por ser pago de quincena, y se prolongan hasta el 16 de dicho mes.
El incremento de congestionamientos se da a partir del 21, 22 y 23 de diciembre, debido a las compras de última hora.
Este caos se registra en el Centro Histórico, a causa de las ventas informales y los pequeños comercios.
También, la 6a. y 7a. avenidas de la zona 9, por los bancos y entidades financieras, así como el bulevar Los Próceres, la calzada Roosevelt y la 12 avenida de la zona 9, debido a los centros comerciales.
A ello se suman los ejes viales de la capital, a causa de la concentración de comercios.
Los días 25 y 26, los congestionamientos ocurren en los carriles de salida de los ejes viales de la capital, y la situación se repite el 1 y 2 de enero, pero en los carriles de ingreso.
Conducta violenta
?Este desorden crea una conducta de violencia en las personas, lo cual contradice el espíritu de concordia y amor que pregona la Navidad?, señala la sicóloga Lucrecia Castro de Polasek.
?Somos esclavos del consumismo, se piensa en regalar y gastar lo que no se tiene, y ante la situación económica actual, las personas van estresadas?, agrega.
Juan Luis Catú, presidente de la Gremial de Escuelas de Automovilismo, coincide en que el estrés por comprar o la situación general en el país provoca un cambio en la actitud de los conductores, quienes pueden sufrir un accidente en un pequeño descuido.
El problema de los congestionamientos no se queda sólo en mayores costos de combustible, pérdida de tiempo y recalentamientos de vehículos.
?Nosotros tenemos problemas si llevamos a una persona herida de gravedad y las vías están congestionadas; podemos perder una vida?, señala Ricardo Lemus, oficial del Cuerpo de Bomberos Municipales.
Señala que, si bien no hay registros de accidentes de tránsito graves a causa de los congestionamientos durante la época navideña, sí son comunes los pequeños ?topones? de vehículos, lo cual genera más embotellamientos y discusiones entre conductores.
Control estricto del tráfico
Aunque el caos parece inevitable, la comuna ha destinado para este año 150 agentes más de la Policía Municipal de Tránsito, a fin de hacer fluido el tráfico, asegura Morales.
También coordinará con las policías privadas de los Centros Comerciales, para evitar aglomeración de vehículos en los accesos de éstos.
?Usaremos grúas para retirar los camiones con mercadería cuando obstruyan el paso?, agregó.
Catú insiste en la necesidad de una campaña preventiva para concienciar al peatón y al conductor, pero, sobre todo, fomentar la educación vial.
Lemus recomienda mantener la calma y buscar siempre vías alternas, a fin de no quedar atrapado por el tráfico.
De Polasek recomienda que en lugar de entrar al mar de compromisos y regalos, se piense en el significado de la Navidad: paz, amor y tolerancia.