Como era de esperarse, esta campaña estará llena de campañas negras, acusaciones, filtraciones y golpes bajos. La facilidad de comunicación que ahora permiten las redes sociales hace que una persona pueda publicar cualquier información, sea o no veraz, a favor o en contra de algún candidato o partido, y que esa información se difunda más rápido que incendio en campo seco. De allí la importancia de que estemos claros no solo del mensaje, sino ahora también del mensajero, para no caer en el engaño de parar siendo transmisores de campañas negras, chismes y rumores.
Considero importante aquí tratar de diferenciar entre las campañas negras y las filtraciones. Entiendo que las campañas negras generalmente son mentiras que se publican sobre alguna persona, empresa o suceso con el fin de afectar la credibilidad de los sujetos en cuestión. Y entendería una filtración como información que generalmente es veraz, pero que se ha mantenido secreta y que se hace pública con el mismo fin: afectar la credibilidad de los sujetos en cuestión.

Por supuesto que en la vida real casi nada es cien por ciento puro y algunas cosas de que nos vayamos enterando será difícil encasillarlas en alguna de estas definiciones excluyentemente, ya que lo más probable es que la mayoría de ataques a la credibilidad de los candidatos que escuchemos sean una mezcla de algunas verdades y algunas mentiras. Lo que no cambiará es el objetivo: minar su credibilidad.

Hago la salvedad de que ahorita nos referimos al ámbito eleccionario porque estamos imbuidos en la campaña electoral, pero todo esto es aplicable y lamentablemente se usa, en muchos ámbitos de la vida de las personas y las empresas. Veamos algunos ejemplos que se han dado. Estuvo circulando un video en el que se denunciaba que la aparente preferencia de Leopoldo Guerra por el Movimiento Semilla y Thelma Aldana era porque su hija era candidata de Semilla.

También se mencionaba el tema de la supuesta contratación de esta misma hija por Thelma Aldana en el MP. En este caso Movimiento Semilla aclaró que ningún pariente de Guerra va como candidato en su partido. Si esto es así, esa parte del video sería falsa. Lo que no he visto que nadie desmienta hasta la fecha es la contratación en el MP de la hija de Guerra; incluso ya hay hasta una denuncia planteada al respecto. Por el momento podemos presumir que esto es cierto, por lo que en este caso tendríamos justo el ejemplo de una falsedad difundida a la par de un hecho cierto pero desconocido por la población. Ambos publicados con el propósito de minar la credibilidad de todos los involucrados, Thelma Aldana, Semilla y Leopoldo Guerra.

Luego está el caso del audio de la llamada entre Sandra Torres y Gustavo Alejos. Esta podemos considerarla una “filtración” de una llamada que ni los mismos del partido UNE descalificaron como mentira. Lo que es más, acusan directamente a Juan Francisco Sandoval de haberlo filtrado de manera ilegal, con lo que ellos mismos confirman su veracidad. Obviamente el momento en que se filtró tiene mucho que ver con lo de minar su credibilidad. Haberlo filtrado puede ser ilegal, y quien lo hizo haber cometido un delito, pero ello no cambia el hecho de que ahora la población conoce de viva voz de la misma candidata actividades muy probablemente ilícitas en las que participó. Este audio se pasa llevando hasta la credibilidad de los magistrados de la CSJ, ya que cualquiera con un poco de sentido común podría determinar de este audio que por lo menos se les debería investigar, a ver si sucedieron las cosas de las que allí conversan.

Y la cosa apenas está iniciando.