Se descubrió la rana mutable (Pristimantis mutabilis) en los bosques nublados de la Reserva Las Gralarias y en la Reserva Los Cedros, ambas ubicadas en la zona del Chocó, en el norte del país.
“Encontrar animales tan increíblemente flexibles en su apariencia es fascinante”, sostuvo Guayasamín, quien aseguró que esta pristimantis, por medios desconocidos, “produce” tubérculos y luego los esconde.
Añadió que “hasta ahora, los taxónomos considerábamos que la textura de la piel de las ranas era una característica inmutable, es decir, que cada especie tenía un tipo de piel que se mantenía constante durante su vida”.
Guayasamín, que también se desempeña como editor de la revista científica Neotropical Biodiversity, señaló que a los investigadores les tomó seis años encontrar unos pocos individuos para poder desarrollar adecuadamente el trabajo de investigación pues la especie se camufla en el musgo, sitio en el que habita.
Proceso de una rana que muta su piel. (Foto Prensa Libre: Sci-news)
“Creo que lo que observamos en Pristimantis mutabilis es una rareza en el mundo animal. Algo extraño que puede pasar en unas pocas especies, pero que seguramente es la excepción más que la regla”, contó.
Añadió que, incluida la Pristimantis mutabilis, en el país se han registrado 557 especies de anfibios, siendo así Ecuador el tercer país más megadiverso en estos ejemplares.