“Venimos insistiendo en que muchos periodistas del interior de sus países desempeñan su trabajo bajo un manto de inseguridad y desprotección, por lo que instamos a las autoridades a que investiguen en profundidad y apliquen de inmediato mecanismos de protección”, destacó el presidente de la SIP, Gustavo Mohme.
La Embajada de Estados Unidos en el país emitió un comunicado, en el cual mostró sus condolencias a las familias de los reporteros ultimados.
Agrega que esa Embajada continuará en el apoyo de la libertad de prensa en el país y que espera la pronta solución del caso.
Reporteros Sin Fronteras coincidió con la SIP, ya que exhorta a las autoridades a que se haga una investigación independiente, exhaustiva y objetiva.
“Nos encontramos muy preocupados por la situación de los actores de la información en Guatemala. Desde que el Gobierno anunció que crearía un programa de protección de periodistas, en noviembre de 2014, no ha proporcionado más información sobre su política en esta área y la situación está lejos de mejorar”, resaltó Claire San Filippo, del Despacho Américas.
Asimismo, el Centro PEN Internacional de Escritores manifestó su indignación por el asesinato de dos integrantes del periodismo nacional.
“Hechos como estos y que van en contra de la libertad de expresión, Derecho Universal protegido en nuestra Carta Magna, enlutecen al periodismo nacional”, resalta el comunicado.
La Asociación Mundial de Periódicos y Editores de Noticias (WAN-IFRA) y el World Editors Forum condenaron el ataque contra los comunicadores.
“Hacemos un llamado a las autoridades de Gua-temala para poner en marcha una investigación exhaustiva sobre este hecho, que constituye aparentemente un ataque directo contra la libertad de expresión”, manifestó el secretario general de WAN-IFRA, Larry Kilman.
