Con la victoria Boca Juniors accedió directamente a la segunda ronda (fase de grupos) de la Libertadores y dejó fuera del certamen a Vélez Sarsfield, dándole además el boleto a la primera ronda del torneo a Estudiantes de La Plata.
El equipo ‘xeneize’ jugará en el Grupo 5 junto a Zamora de Venezuela, Wanderers de Montevideo y el vencedor de la llave entre Palestino de Chile y Nacional de Uruguay.
El partido fue trabado, con pocas ocasiones de gol y muchos roces, aunque el equipo de Rodolfo Arruabarrena fue superior una vez que se puso en ventaja y en el segundo tiempo generó las mejores situaciones aunque no las pudo concretar por fallas en la definición.
“Es el partido más importante para el club. Nos da prestigio participar. Fue un partido complicado”, dijo Arruabarrena tras el final.
Boca quedó con 10 hombres a los 80 minutos por expulsión de Andrés Chávez que estuvo en la cancha apenas 14 minutos, ya que había ingresado en reemplazo de Juan Manuel ‘Burrito’ Martínez.
Chávez vio la tarjeta roja por una violenta reacción contra el defensor juvenil velezano Facundo Grillo, quien cinco minutos después también fue expulsado por doble amonestación.
Sobre la hora, Vélez terminó con nueve jugadores al irse expulsado Leandro Somoza también por doble amonestación.
– Mucha lucha y poco fútbol –
“Nos costó jugar, los dos equipos luchamos pero Boca tuvo más juego. No pudimos sostener el volumen de juego, nos estuvimos finos”, admitió el defensor de Vélez Sebastián Dominguez.
Vélez y Boca jugaron este desempate por haber igualado en puntos en la temporada 2013/2014 de Argentina, pero el club de Liniers reclamó en vano que se le reconociera la plaza en la Libertadores porque la diferencia de goles le favorecía.
“Es todo muy desprolijo, estábamos adentro de la Copa y hoy estamos afuera. Tengo 34 años, ¿cuándo voy a poder volver a jugar una Copa Libertadores?”, se lamentó Domínguez.
Boca se había ido al descanso ganando 1-0 tras un primer tiempo de juego poco claro en toda la cancha, pero había arrimado más peligro al arco contrario que su rival.
Antes del gol de Colazo, la jugada de mayor peligro la protagozizó el delantero ‘xeneize’ Jonathan Calleri, a los 28, con un potente remate bien tapado por el arquero uruguayo Sebastián Sosa.
A los 43, Meli estuvo cerca de anotar el segundo para Boca con un cabezazo que se perdió por el costado izquierdo del arco de Vélez.
Menos de un minuto más tarde el equipo de Liniers casi logra la igualdad tras un veloz contragolpe y Yamil Asad se sacó la marca, remató de zurda pero la pelota pegó en la base del palo izquierdo del arco de Agustín Orión.
