La persona habló a condición de que se mantuviera su anonimato porque la multa no había sido anunciada.
Lynch ya ha recibido varias sanciones de la NFL, la mayoría por negarse a hablar con la prensa pese a que así lo establece su contrato. En noviembre fue multado con 50.000 dólares por violaciones continuas a la política de la liga. En ese momento la liga cobró una multa de 50.000 que se le fijó por violaciones cometidas en 2013.
La multa de 2013 se mantuvo en suspenso bajo el entendido de que Lynch cooperaría en el futuro, lo que no ha ocurrido.
En el día de prensa del Súper Bowl pasado, en Nueva Jersey, Lynch pasó la sesión resguardado por una barrera hablando sólo con sus compañeros y con Deion Sanders del canal de la NFL y la radio de las Fuerzas Armadas. Ignoró las preguntas de los periodistas y salió del sitio por un tiempo para volver después.
La liga y los Seahwks discuten las exigencias de Lynch para el día de prensa del próximo martes.
A Lynch se le advirtió antes del partido del domingo que no podía usar zapatos color dorado porque violan el código de vestimenta en la cancha de la NFL y que se le podría expulsar del encuentro si lo hacía.