QUETZALTENANGO.- Empleados del Centro de Salud de Olintepeque indicaron que cada inicio de año hay problemas de abastecimiento, pero en esa sede el problema es grave, ya que no hay ni jeringas, por lo que tienen suspendido el servicio.
Héctor Larios, trabajador social de la citada sede, explicó que la crisis rebasó los límites, a tal punto que no cuentan con medicinas, antibióticos ni vacunas, situación que afecta a unos 25 mil pobladores.
Resaltó que otro problema es que a 20 trabajadores se les adeudan dos meses de sueldo.
Consultados empleados de los centros de Salud de la cabecera y San Carlos Sija, manifestaron que también carecen de vacunas y casi están agotadas las reservas de fármacos.
Según el sindicalista Saúl Hernández, esta ha sido la crisis más grande que ha atravesado la cartera de Salud en los últimos 10 años.
“En el Hospital Regional de Occidente se mantiene un abastecimiento del 75 por ciento, pero jamás se ha tenido completo”, refirió Hernández.
Agregó que el referido centro asistencial tiene una deuda de Q28 millones con proveedores.
Mario Hernández, gerente administrativo y financiero del Área de Salud, señaló que hay un 60 por ciento de desabastecimiento en todo el departamento, debido a que se tienen pagos pendientes con proveedores.
Afirmó que hacen gestiones para tener la disponibilidad financiera y anunció que ya está autorizado el pago para 800 empleados, por lo que en los próximos día será liberado el efectivo.