El árbitro sancionaría a un jugador con una tarjeta blanca como primer aviso y dejar la tarjeta amarilla para una segunda advertencia, explicó el directivo francés.
No es la primera vez que Platini habla de esta idea. En un libro publicado en octubre, promovió “la creación de una tarjeta blanca” que “supondría una expulsión temporal de diez minutos en el banquillo”.
Ahora, “debemos convencer a la FIFA”, que sigue reticente, declaró este domingo.
Además el francés pidió un mayor juego limpio en los estadios y exhortó a los jugadores a no protestar la decisiones arbitrales para “dar ejemplo a los más jóvenes”.