La remodelación es parte del proceso de colaboración entre el Organismo Legislativo y el gobierno taiwanés, en el que incluía la primera fase de remodelación del inmueble que es parte del Patrimonio Cultural, en el corazón del Centro Histórico, que actualmente aloja oficinas de algunos parlamentarios.
Taiwán donó Q1 millón 400 mil para los trabajos de recuperación del inmueble, donde también se acondicionó un salón para que pueda ser utilizado por los diputados de los diferentes bloques para citaciones o reuniones de trabajo.
Antes de la remodelación, la Casa Larrazábal presentaba daños en su estructura, filtraciones de agua en los techos, grietas en las paredes y hundimiento del piso.