26 de septiembre
57 estudiantes de una escuela de Ayotzinapa (Guerrero) desaparecen tras ser víctimas de ataques a tiros de la policía local y sicarios del cártel narcotraficante Guerreros Unidos en los que mueren seis personas. Los jóvenes, la mayoría de entre 18 y 21 años, se habían desplazado a Iguala para recaudar fondos y en el momento del ataque se habían apoderado de dos autobuses para regresar a su escuela.
30 de septiembre
Son encontrados ilesos 14 de los estudiantes desaparecidos, que estudian para ser maestros rurales en una emblemática escuela conocido por su formación socialista y sus contundentes acciones políticas.
4 de octubre
Encuentran los restos de 28 personas en fosas clandestinas cerca de Iguala. Los primeros peritajes descartaron que entre ellos hubiera estudiantes desaparecidos.
6 de octubre
El presidente Enrique Peña Nieto, que ordenó a la fiscalía general asumir este caso, prometió que no habrá impunidad para el crimen.
7 de octubre
Estados Unidos y la Organización de Estados Americanos (OEA) se unen a los reclamos internacionales, entre ellos de la ONU, para que México esclarezca el crimen.
17 de octubre
La fiscalía anuncia la captura de Sidronio Casarrubias, supuesto líder de Guerreros Unidos.
23 de octubre
El gobernador de Guerrero, ngel Aguirre, se aparta del cargo en medio de violentas protestas que reclamaban su dimisión por su falta de reacción en este caso y por no haber frenado la violencia en su región, que tiene los índices de asesinatos más elevados de México.
24 de octubre
La fiscalía eleva de 28 a 38 el número de cádaveres encontrados en una decena de fosas clandestinas y que aún no han sido identificados.
29 de octubre
Peña Nieto recibe por primera vez a las familias de los desaparecidos y les pide confianza en las investigaciones. Los padres son escépticos respecto a las autoridades y aseguran que sus hijos siguen con vida.
4 de noviembre
Policías federales mexicanos capturan en Ciudad de México al exalcalde de Iguala, José Luis Abarca, y su esposa, ambos acusados de estar al servicio de los Guerreros Unidos. La fiscalía acusa a Abarca de ordenar a sus policías que reprimieran a los combativos estudiantes porque pensaba que iban a sabotear un acto público de su esposa.
5 de noviembre
Más de 60 mil mexicanos volvieron a protestar en Ciudad de México para exigir la aparición con vida de los jóvenes y castigo para todos los responsables del crimen.
— 07 de noviembre: La fiscalía informa que detenidos confesaron que los estudiantes fueron asesinados y sus cadáveres incinerados, aunque recalca que hasta no tener pruebas científicas de ello los seguirá considerando como desaparecidos.