En Quetzaltenango, este tipo de hurto en el Cementerio General no es algo nuevo, pues ya se había denunciado esta situación; sin embargo, las autoridades no hacen nada, resaltó el poblador Raúl Cajas.
“Hay mucho daño, sobre todo en panteones históricos. Además, los delincuentes quiebran floreros y pintan grafitis en mausoleos. En mi caso, nos quebraron la plaqueta y tuvimos que volver a instalarla”, añadió Cajas.
Amílcar Rabanales, otro residente, señaló que tendrá que gastar Q2 mil 500 para arreglar el panteón donde yacen los restos de sus padres, debido a que sujetos le arrancaron las barandas de metal.
“Los chatarreros son los que hacen daño. Todo el metal lo arrancan y dejan dañados los panteones. No es posible que no respeten; no es tanto lo económico, sino la falta de moral de unos cuantos inescrupulosos que por unos centavos que le van a sacar a lo robado, dañan el lugar donde están nuestros difuntos”, lamentó Rabanales.
En el cementerio hay 15 mil panteones registrados, pero la mayoría de los que han sido arruinados están en el centro histórico del camposanto.
José Chávez, administrador del lugar, comentó que existen unos 30 mausoleos dañados, a los que les han arrancados puertas y barandas, sobre todo a los más históricos, y los que tienen capilla. Aseguró desconocer con exactitud cuántos panteones han sido saqueados, pues muy poca gente denuncia.
Agregó que las quejas se canalizan a la municipalidad, pero no han tenido atención.
Chávez denunció también que la semana pasada ocho tumbas de un panteón fueron exhumadas de manera ilegal, en la 24 avenida del cementerio. “No se encontraron restos humanos, solo las cajas”, expuso el administrador.