Más adelante, el robot ampliará su repertorio de expresiones e integrará otras funciones como la capacidad de hablar y de reconocer el habla, según Toshiba, que prevé comercializar el androide hacia el 2020.
Este “robot social” está destinado a servir de “compañía y asistencia” para las personas de edad avanzada que sufran demencia senil o algún grado de discapacidad auditiva, y podría tener utilidad tanto en el ámbito doméstico como en el sanitario, señaló la compañía nipona.
El prototipo está equipado con 43 motores que le permiten mover con fluidez sus extremidades superiores y cabeza, así como con sensores de movimiento, tecnología de reconocimiento facial y de aprendizaje de gestos y de expresiones.
Ha sido desarrollado en colaboración con la empresa tecnológica aLab, la Universidad de Osaka y los institutos nipones de tecnología Osaka y Shibaura.
El androide será exhibido en Ceatec, la mayor feria de tecnología de Japón que se celebra desde mañana (martes) hasta el día 11.