“La intervención era necesaria para estabilizar el cuarto hueso metatarsiano, evitando así la sobrecarga en la zona de la fractura y, al mismo tiempo, para estimular la zona del pie, con el fin de obtener una cura absoluta. La intervención médica fue necesaria después de que el dolor persistiera”, precisó.
El joven atacante italiano, entre decisiones técnicas y lesiones, no ha podido gozar apenas de minutos desde el comienzo de la temporada.
Con esta nueva ausencia, el Faraón se perderá, por lo menos, el encuentro de ida de los octavos de final de la Liga de Campeones entre su equipo y el Atlético de Madrid del próximo 19 de febrero.