Brasil, tierra del Carnaval y de las reinas de belleza con poca ropa, prohíbe sin embargo tener los pechos desnudos en las playas.
Rios dijo al periódico que la idea se le ocurrió durante la “Marcha de las putas” que se celebró en julio pasado en plena visita del papa Francisco en el marco de la Jornada Mundial de la Juventud católica, cuando observó la reacción agresiva de una gran parte de la población.
La joven decidió lanzar el evento después de que la actriz Cristina Flores fuera detenida por la policía por “atentado al pudor” al posar para fotos en la playa sin el sostén de su bikini con el fin de promover una obra de teatro.
“En Rio hacer topless es visto como un delito. Siempre me pareció extraña esta actitud puritana en Brasil, donde en un momento del año (Carnaval) se ven mujeres desnudas por todas partes, en las portadas de las revistas, en los quioscos de periódicos” , explica Rios, militante de Amnistía Internacional.
Varios hombres han confirmado su asistencia por “solidaridad” y Rios llamó a extender el movimiento a otras playas de Rio donde hacer colaless (usar string-bikini) se considera completamente normal.