Siete de los fallecidos fueron sacados de la mina con vida y trasladados a un hospital, pero no respondieron al tratamiento médico.
Hace dos semanas, un suceso similar dejó un saldo de diez muertos y 28 heridos tras una filtración de monóxido de carbono en una mina de oro en la provincia china de Jilin, también al norte, según informó entonces la agencia oficial Xinhua.
Las minas chinas, en especial las de carbón, se encuentran entre las más peligrosas del mundo y dejan cerca de tres mil muertes anuales, debido a la falta de medidas de seguridad y la sobreexplotación.