Los patrulleros japoneses, que vigilan estas islas e intervienen contra las incursiones navales chinas, forman parte de una unidad con base en la isla de Okinawa, compuesta por 900 hombres.
“Nos parece necesario asignar navíos importantes para hacer frente a la situación actual en la que buques chinos están cada vez más presentes en las aguas circundantes de las Senkaku”, indicó la portavoz.
Pekín envía regularmente barcos, y últimamente aviones, a los alrededores de las Senkaku, tras la nacionalización en septiembre de tres de las cinco islas por parte de Tokio, que las compró a su propietario nipón.
El conflicto se agravó entonces, especialmente con la convocatoria durante una semana en China de manifestaciones antijaponesas, en ocasiones violentas. Desde entonces las relaciones entre los dos gigantes asiáticos se han enfriado.
La unidad naval anunciada por Japón tendrá su base cerca del archipiélago disputado, en la isla de Ishigaki, a unos 175 kilómetros al sud este de Uotsuri, la principal isla del archipiélago en discordia.