“El duque y la duquesa de Cambridge están encantados de confirmar que esperan un bebé en julio“, indicó un portavoz, que aprovechó para desmentir los rumores que sugerían que Catalina, de 31 años, podría estar esperando gemelos.
El portavoz del Palacio de Saint James apuntó además que la duquesa de Cambridge “continúa recuperándose” de las fuertes náuseas padecidas en las primeras semanas de embarazo, las que dieron lugar a esas especulaciones.
El anuncio del embarazo de la duquesa de Cambridge se vio precipitado, el pasado 3 de diciembre, por sus problemas de salud, que la mantuvieron varios días hospitalizada en Londres y han recortado sus apariciones públicas, algo que se mantendrá hasta que dé a luz.
El que será el primer nieto del príncipe Carlos de Inglaterra y el tercer bisnieto de la reina Isabel II está llamado a ocupar en un futuro el trono de Inglaterra.
La semana próxima se debatirá en la Cámara de los Comunes, por vía de urgencia, el cambio de la legislación que permitirá, una vez sea aprobado por los parlamentos de los 16 países que tienen a Isabel II como jefa de Estado, reformar la sucesión para que sea el primogénito quien herede la Corona británica.
Una ley vigente desde 1701 establece la primacía del varón en la sucesión, lo que no ha impedido que dos reinas, Victoria y la misma Isabel II, sean las más longevas en la historia de la monarquía británica.
Una vez nazca, el que en este país es conocido como Royal baby, desplazará a su tío, el príncipe Enrique, como tercero en la línea de sucesión a la Corona británica, detrás de su abuelo, Carlos de Inglaterra, y su padre, el príncipe Guillermo, de 30 años.
Su nacimiento atraerá previsiblemente a Londres a multitud de turistas, por segundo verano consecutivo después de los Juegos Olímpicos de 2012, y recrudecerá el debate sobre si el príncipe Carlos, que este año cumple 65 años, llegará algún día a reinar.