Conductores de autobuses del servicio urbano obligaron ayer a cientos de usuarios a pagar Q2 durante la mañana, aduciendo un alza al combustible.
Los cobros ilegales se efectuaron en diversas rutas de la capital, pese a que la Asociación de Empresas del Transporte Urbano había asegurado que el precio del pasaje sería de Q1.25, como ocurre los domingos o días de fiesta.
?No habrá aumento al valor del pasaje, sólo se reducirá la flota que esté en servicio?, dijo Luis Gómez, vocero de los empresarios, la semana pasada.
Ayer, familias completas fueron forzadas a descender de los autobuses cuando se negaron a pagar la tarifa que exigían los pilotos. ?Esto es un robo; no voy a pagar Q16 de pasaje?, reclamó Juana Clementina Zúñiga, de 45 años, quien, en el kilómetro 15 de la carretera Interamericana, esperaba un autobús que la llevara a El Trébol.
A Zúñiga la acompañaban tres hermanas y cuatro sobrinas. ?Vamos a esperar las que cobren Q1.25?, expresó.
Otros que les reclamaron a los conductores recibieron como respuesta: ?El diésel está caro, y si no les parece, mejor tomen un taxi?.
Después de haber recibido un incremento al subsidio que otorga el Gobierno al servicio de transporte urbano, los empresarios se comprometieron a mantener la tarifa sin alteraciones, algo que no ocurre.
En el teléfono 1551 de la Municipalidad de Guatemala, los afectados pueden presentar su denuncia.