Estados Unidos

Migrantes guatemaltecos en Estados Unidos tienen miedo de ser deportados, luego de la investidura de Trump  

Los connacionales que tienen negocios y que son padres de familia dicen que tienen miedo de ser deportados y dejar a sus hijos en Estados Unidos, ante el endurecimiento de las políticas migratorias.  

A menos dos 2 grados centígrados migrantes trabajan en la calle descargando productos para un negocio guatemalteco en Estados Unidos. (Foto Prensa Libre: Rubén Lacán)

A menos dos 2 grados centígrados migrantes trabajan en la calle descargando productos para un negocio guatemalteco en Estados Unidos. (Foto Prensa Libre: Rubén Lacán)

El presidente de EE. UU. Donald Trump, declaró emergencia nacional en la frontera con México y con esto busca la vía expedita para evitar la entrada de personas de forma irregular e iniciar con las deportaciones masivas, situación que ha preocupado a los inmigrantes.  

Hace 18 años la pareja de esposo, Rosenda Xuruc y José Yax migraron de Totonicapán hacía Nueva York. Juntos iniciaron un negocio de venta de trajes típicos. 

Xuruc y Yax tienen cuatro hijos entre uno y 15 años, que nacieron en EE.UU. y ayer declararon tener miedo de ser deportados y dejarlos solos.  

“Sí tengo miedo, primeramente por mis hijos, porque ellos han nacido aquí”, comentó Xuruc.  

Agregó que ante las deportaciones masivas que anunció el nuevo presidente estadounidense, Donald Trump, buscaron asesoría de un abogado experto en migración.  

“No podemos optar a una residencia o ciudadanía, pero el abogado nos dijo que las deportaciones son contra los criminales, y nosotros no hemos cometido ningún delito, pagamos nuestros impuestos”, reconoció.  

Xuruc señaló que durante el primer mandato de Trump en la Casa Blanca no se actuó en contra de los indocumentados trabajadores. 

“Donald Trump ya gobernó cuatro años y no pasó nada, simplemente uno tiene que estar haciendo las cosas bien, lo que dicta la ley”, añadió.  

El comerciante Edvuin Quic llegó a Nueva York hace dos décadas para poder trabajar y ayudar a su familia, hace cuatro años emprendió un negocio de comida rápida y el dinero que gana es para pagarle los estudios a sus cinco hermanas y apoyar a sus padres. 

Quic dijo que las nuevas autoridades estadounidenses deben evaluar a quién van a deportar, porque hay migrantes que respetan las leyes, pagan sus impuestos y no han cometido delitos.  

“Sí tengo miedo de que me agarren y me deporten, porque dejaré todo acá en Estados Unidos, los sueños que tengo” indicó.  

Mencionó que ya buscó asesoría con un abogado y estará atento a cómo se apliquen las nuevas políticas migratorias de Trump.  

Quic enfatizó que tiene empleados que son ilegales, pero han decidido seguir operando de la misma forma, ya que no han infringido las normas.  

"Contamos con cuarenta empleados y hay personas que son ilegales. Estamos poniendo esto en la mano de Dios”, destacó. 

El artista Juan Carlos Pinto llegó a Estados Unidos hace 27 años y comentó que no tiene miedo de ser deportado. 

“Crecí en Guatemala en la década de los 80, ese era miedo, que te patearan la puerta los militares.  Acá es Nueva York y ha sido una ciudad bien amistosa con los inmigrantes”, argumentó.  

Pinto dijo que las promesas de Trump pareciera que son contra los criminales. 

Además, dijo que ha cumplido sus metas en Estados Unidos y  tiene planeado volver a Guatemala en los próximos cinco años. 

Juan Carlos Pocasangre, presidente de la organización Guatemaltecos en Nueva York, recomendó a los indocumentados a evitar problemas con los policías estadounidenses. 

Enfatizó que ha ayudado a connacionales y latinoamericanos que su estatus migratorio es ilegal, y que han tenido dudas y miedo por las promesas de  Trump sobre las deportaciones.  

“Lo primero que les estoy aconsejando desde hace meses, cuando ganó la presidencia Trump, que es que eviten a toda costa tener algún problema con la policía o ser arrestado por algo tan pequeño, porque estoy seguro de que los llevaría a una deportación”, aseguró.  

Destacó que al momento de ser capturado es recomendable llamar a un abogado, permanecer en silencio y no firmar ningún documento.  

ESCRITO POR:
Rubén Lacán
Periodista con experiencia en televisión y especializado en temas políticos, comunitarios y sucesos.