Doce vulcanólogos viajarán del 18 al 28 de enero al país centroamericano para una nueva edición del experimento multiparamétrico destinado a estudiar el vulcanismo explosivo denominado “BACIO” ( Adquisición de Banda Ancha y Operación de Imagen ), explicó el INGV en una nota.
Cada año, el proyecto BACIO reúne en la localidad italiana de Stromboli, donde se encuentra el homónimo volcán, a especialistas en técnicas de observación y seguimiento de volcanes de todo el mundo y este año el encuentro se desarrolla en Guatemala, a más de 3 mil 600 metros de altitud, en las cimas de Fuego y Santiaguito, según el INGV.
“El objetivo de BACIO es promover el uso sinérgico de diferentes técnicas de medición en el campo, fomentando el intercambio de habilidades y la ampliación de nuestro conocimiento de los procesos eruptivos”, indicó el director de investigación del INGV que lidera la expedición, Piergiorgio Scarlato.
“También esta vez, como en ediciones anteriores, se instalarán múltiples sistemas de adquisición de imágenes junto con instrumentos de registro de señales acústicas, sísmicas y geoquímicas“, añadió.
El experimento abordará varios aspectos de la actividad eruptiva de los volcanes de Guatemala para compararla con la observada en otros como los italianos Stromboli y Etna y se profundizará en diversos aspectos, como la dinámica de las columnas eruptivas, la dispersión de los productos expulsados en el suelo y los gases emitidos por los volcanes.
“El riesgo volcánico en Guatemala se encuentra entre los más altos del mundo, con nueve de cada diez habitantes expuestos al impacto de las erupciones. Los volcanes de Fuego y Santiaguito han provocado en el pasado erupciones desastrosas, la última de las cuales ocurrió en 2018 y causó más de 300 muertes ”, señaló Scarlato.
Y por ello, añadió, “elegimos venir aquí para poner a disposición del Observatorio local nuestros conocimientos y técnicas desarrollados para el estudio y seguimiento de los volcanes”.